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jueves, 9 de julio de 2020

REFLEXIONES │ Kintsugi: Vive Tú Esencia


•─◙ Hoy expondré bajo una perspectiva muy personal, lo importante que nos es a nosotros, NO alterar nuestra esencia, ni permitir que lo hagan, donde mi principal motivación será hacer una invitación a la reflexión sobre la concepción y forma del pensamiento, remarcando bien nuestro punto de partida, observando, analizando y estudiando detenidamente, ciencia y filosofía como base y el misticismo como una brújula, pudiendo optar por las mejores decisiones en nuestro día a día.─


•Thich Nhat Hanh, maestro zen vietnamita, enseña: "Cuando morimos los hombres, en realidad lo que sucede es que cambiamos de estado, NO desaparecemos, sino que simplemente modificamos la manera en la que estamos actualmente, ya que la vida, solo es un estado de nuestro ser; Ser que él piensa no se crea ni se destruye, que es único e irrepetible, pero que en verdad puede transformarse; lo cual significa pasar de un estado o forma a otro, lo que llama el trascender."


La esencia de las cosas, es su ser inherente que trasciende, conecta y mueve los límites físicos, siendo la base permanente que constituye su naturaleza; El término, proveniente del latín essentia, nos habla de la noción que hace referencia a lo intrínseco y más importante de las cosas─


// "Transformados, Renovados o Restaurados, pero... Jamás cambiados" //
...Pues a la verdad y a la razón, nada ni nadie cambia.


•◘○ Es imposible pasar de «ser» a simplemente «no ser» contrario a lo dicho por el príncipe de Dinamarca Hamlet, en la obra de William Shakespeare, todos fuimos creados con un propósito, por algo y para algo, nada es casual, más bien causal, somos situados en el momento, tiempo y lugar conforme se requiere para cumplir con nuestro propósito, o quizás mejor, en la sincronicidad del momento preciso; Luego entonces, en este camino que nos situaron, la vida y la muerte, errores y aciertos, virtudes y vicios, nos van a ir forjando, y es aquí donde debemos aprender, conocer y entender plenamente quienes somos, para entonces poder entrar en nuestra metamorfosis del alma, siendo en realidad transformados, renovados, restaurados, pero... imposiblemente cambiados, ya que a la verdad y la razón, repito, nada ni nadie cambia;

Contrario a lo que normalmente se cree, en el ser humano, el poder de cambiar literalmente NO le es posible, ni siquiera un poco probable, por lo menos no, como nos lo han inculcado; Nosotros Somos en la realidad una bella y compleja mezcla de finos elementos desde el momento en que venimos a existir en este plano y que somos engendrados; 23 cromosomas de cada progenitor, se fusionan y dividen para formar y dar paso a un nuevo ser, donde el Espíritu de Vida o Aliento vital, hace como especie de puente logrando unir y entrelazar la materia ─ energía, que es el cuerpo, con el espíritu humano, que es su alma ─ mente del hombre; En ipso facto nuestra alma (Dispuesta Exclusivamente por Dios) es agregada con propósito a esta mezcla; Debiendo tener muy en claro que en estos procesos, no intervenimos, ni podemos intervenir, sino que nos son designados, pues como ya he dicho con anterioridad, existimos desde antes de nacer, y seguimos viviendo aún después de morir; Aquí se une a esta mezcla otro ingrediente igual de importante, que viene a tomar relevancia más adelante en nuestro propósito de vida, el entorno, el tiempo, la situación y el lugar en que somos contextualizados, incluso el lado del hemisferio de la tierra en que vivamos, oriente u occidente tiene mucho que aportar, este es el tercer paso en los procesos que formará nuestra esencia; Entonces, todo indica que en verdad podemos ser transformados, pero Jamás cambiados, pues ¡Nunca podremos eliminar por completo lo que somos

Tomamos como paradigma que los tiempos y las cosas cambian, y como parapeto la utopía que por ende nosotros también cambiamos, pero.., al pararnos dentro de la realidad, comprendemos que ello solo puede ser un espejismo; Resulte la realidad que resulte, hasta que se traiga a suceder e incluso después, tal realidad siempre será aquella conforme al propósito encomendado en esta vida, y que solo tú, establecerás en la formael tiempo en que vendrá a suceder. Las diferencias se encuentran en lo que creemos saber, entre lo que es el cambio y la transformación, comúnmente creyendo que son lo mismo, pero en realidad, son totalmente diferentes

─•La transformación implica tomar de lo ya se tiene, de lo ya existente, permitiéndonos trascender, progresar, logrando avanzar mejorando lo que ahora se tiene; Nos permite a su vez rescatar las cosas buenas, lo que son útiles, modificarlas o corregirlas, o sea, que la transformación es dinámica, quizás en apariencia se podrá percibir diferente, pero medularmente será siendo una transformación; A diferencia del cambio, que este interrumpe el progreso, volviendo a la línea de partida una y otra vez, el cambio implica siempre una ruptura con algo que se tiene y está presente, busca lo nuevo, lo distinto, el reinicio, algo que a la verdad le resta el poder de adquirir valor y experiencia, es una contraposición de la renovaciónel cambio es quitar por completo y colocar algo distinto, otra cosa en ese lugar, comprendiendo que al sacar, invariablemente, se eliminarán todas las cosas, sin importar que sean buenas o malas, útiles o inútiles, que se irán todas juntas para ser reemplazadas por algo nuevo, desconocido. La transformación entonces creo que es mejor, porque nos permite rescatar las cosas de valor, las útiles, las que tienen historia, las más buenas, las mejores cosas, las funcionales, tal hecho nos ayuda a ser creativos e ir trascendiendo, al adquirir experiencia e ir estableciendo legado.






Transformar es hacer lo que se tiene que hacer sin alterar la esencia, la función; Renovar es convertir lo que se tiene en tiempo, forma y propósito; Restaurar es reparar los desperfectos o daños por uso, por vivencia, por fatiga, buscando estar lo mas cercano a su estado primigenio, para lo que fue dispuesto.., Así que amigo mío, transforma, renueva, restaura, convierte, pero nunca pienses siquiera cambiar, pues el orden de prioridad, no alterará tus resultados.



Entre las orillas del dolor y el placer fluye el río de la vida
Solo cuando la mente se niega a fluir con la vida se 
estanca en las orillas y se convierte en un problema.
Sri Nisargadatta Maharj



"Toda vasija útil tiene grietas por su uso, por 
el trato que recibe, porque realmente funciona para 
lo que fue hecha; DIOS conoce nuestras 
grietas; aprecia a su vasija dándole su valor; 
Él es nuestro Alfarero, con sus manos nos diseñó 
con propósito; transforma tu entorno, transfórmate 
a ti mismo, pero eso si... nunca alteres tu esencia."



Y entonces... ¿Qué es mejor? ¿La oruga, la crisálida o la mariposa? 
No existe el mejor ni el peor, son términos relativos; Simplemente 
son diferentes etapas en el camino de su evolución. 
Y por etapas refiero a las fases que conforman parte de 
cualquier proceso de desarrollo o transformación.







Gracia y Paz;
especialmente 
a ustedes mis 7

♥JEPH; EDPC; GJPC; AJPH; MDSG; KCPU; MPU♥

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1 comentario:

  1. "Kintsugi, la belleza de las cicatrices de la vida"

    Técnica centenaria de Japón que consiste en reparar las piezas de cerámica rotas y que ha acabado convirtiéndose en una filosofía de vida. Frente a las adversidades y errores, hay que saber recuperarse y sobrellevar las cicatrices.

    Hace cinco siglos, surgió en el lejano Oriente el kintsugi, también conocido como carpintería de oro, es una apreciada técnica artesanal con el fin de reparar un cuenco de cerámica roto. el sogún Ashikaga Yoshimasa, muy apegado a ese objeto indispensable para la ceremonia del té, lo mandó a arreglar a China, donde se limitaron a asegurarlo con unas burdas grapas. No contento el señor feudal recurrió a los artesanos de su país, que dieron finalmente con una solución atractiva y duradera.

    Mediante el encaje y la unión de los fragmentos con un barniz espolvoreado de oro, platino o plata, la cerámica recuperó su forma original; A bien las cicatrices doradas visibles transformaron su estética, evocando el desgaste que el tiempo obra sobre las cosas físicas, la mutabilidad de la identidad y el valor de la imperfección.

    Así que, en lugar de disimular las líneas de rotura, las piezas tratadas con este método exhiben "las heridas de su pasado" con lo que adquieren una nueva vida, se vuelven únicas y por lo tanto, ganan en belleza y respeto.

    En el kintsugi el proceso de secado es un factor determinante; La resina puede tardar semanas, a veces meses, en endurecerse pero es lo que garantiza su cohesión y durabilidad. Entre los cultivadores de la paciencia, Kafka ocupa un lugar privilegiado, para él, la capacidad de saber sufrir y de tolerar infortunios era la clave para afrontar cualquier situación.

    ESM1974

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